Tienes una personalidad clásica. Te gusta apostar por lo seguro y pocas veces sales de tu zona de confort. En ocasiones reprimes tus fantasías por timidez y no te atreves a explorar tu sexualidad al máximo. Por otro lado, esta posición facilita el contacto visual, lo que te define como una persona emocional y sumamente romántica.

El sexo es una de tus actividades preferidas cuando se trata de liberar el estrés. Esta posición es característica de las personas atrevidas, seguras de sí mismas y súper liberales. Eso sí, prefieres tener relaciones sin invlucrar sentimientos, pues aprecias mucho tu independencia.

Eres una persona tranquila y relajada, te gusta seguir tu propio ritmo y no vivir con prisas. En el sexo eres romántica, entregada y sentimental, te gusta disfrutar cada contacto físico que tienes con tu pareja, desde un abrazo y un beso hasta un roce de manos. Disfrutas mucho la intimidad y te gusta sentirte conectada con tu pareja a nivel espiritual.

Te gusta tener el control de tu vida y no disfrutas ser una persona sumisa. Tienes bien claros tus ideales y tus deseos sexuales, por lo que en la cama te gusta llevar las riendas y seguir tu propio ritmo sin dejarte presionar por tu pareja. Te sientes muy cómoda con tu cuerpo y tu austoestima está por los cielos; eres de esas persona que no se detienen hasta conseguir lo que quieren.